Ser autónomo no es tan fácil como parece. Lo de ser tu propio jefe, diseñar tu propio horario laboral o elegir a tus clientes suena muy bien, pero a la hora de la verdad el día a día del autónomo es más duro que el de los trabajadores por cuenta ajena. Para acabar de rizar el rizo, la cosa es todavía más difícil para aquellos autónomos que deciden emprender con una pyme, con algún trabajador a su cargo, lo que complica todavía más el día a día, en especial en todo lo relacionado con cuestiones fiscales o tributarias.
Un asesor, tu mejor aliado
Hay autónomos que se ocupan por su cuenta de estas cuestiones -o intentan hacerlo por sí solos-, y el resultado suele ser siempre el mismo: desesperación a la hora de cumplir con todos los trámites y una importante pérdida de su tiempo laboral o familiar. Precisamente la conciliación es otra de las cuestiones más complejas para estos profesionales, puesto que a diferencia del resto de trabajadores no cuentan con un horario fijo. Y para asegurarnos de que todo se hace bien, una asesoría para autónomos como por ejemplo Anta Consulting es el primer paso.
En Anta Consulting nos ayudarán en cuestiones como el alta de autónomo, el IVA, el IRPF, el pago de impuestos y cotizaciones a la seguridad social, nos informan sobre nuestros derechos y obligaciones como trabajadores por cuenta propia, etc. También se ocupan de revisar tus facturas. De esta manera podrán analizar las diferentes posibilidades que tienes dentro de la fiscalidad para autónomos, ya que no son iguales para todos, buscando siempre las opciones más ventajosas para ti.
Pero su trabajo no empieza aquí, ya que antes de que te establezcas como trabajador por cuenta propia te pueden ayudar a diseñar tu plan de negocio y hacer un análisis de viabilidad, o asesorarte con la capitalización del desempleo, una opción elegida por muchos desempleados al establecerse por su cuenta. Sus asesores también te informarán de subvenciones, bonificaciones y financiación para autónomos, de las patentes y marcas -muy importante si eres una pyme- o incluso de la formación subvencionada.
Consejos básicos para emprender
Seguro que más de una vez has oído lo de que necesitas un buen plan de negocio. Hay que tener claro hacia dónde vamos, qué camino queremos seguir, pero también quienes somos, nuestro punto fuerte, los puntos débiles y aspectos a mejorar, las oportunidades que tenemos ante nosotros, todos los problemas o amenazas que pueden surgirnos… Teniendo claras todas estas cosas, y trabajando siempre con una mentalidad positiva, de forma tranquila haremos camino fácilmente.
Otra cuestión capital es la de la formación. Trabajar por cuenta propia requiere una formación continua para no quedarnos desfasados respecto a nuestros competidores. Pero no basta con que nos formemos nosotros, también hay que formar a los trabajadores que tenemos en nómina en nuestra pyme. Esto nos permitirá descubrir a los talentos ocultos de nuestra empresa, de forma que saquen a la luz todo su potencial y nos permitirá estar a la vanguardia de los cambios del mercado.
Por último, vamos a ver brevemente unos consejos que te pueden ayudar mucho en tu día a día, empezando por ser humildes y mostrarnos empáticos con clientes y empleados. En este sentido, el hecho de contar con trabajadores experimentados en el sector nos ofrecerá un rendimiento casi inmediato, hay que ser humilde y no intentar ser el que más sabe del negocio. Debemos ser agradecidos y saber destacar los logros de los demás, reconociendo sus méritos. Y, sobre todo, ejecutar nuestro plan a diario y e intentar ser felices como autónomos con la actividad que realizamos.