La mayor parte de los autónomos empiezan su actividad con la intención de facturar lo suficiente para obtener un sueldo considerable para poder vivir correctamente, un sueldo similar al que obtienen los funcionarios o los empleados por cuenta ajena. Pero en el momento en que a un autónomo le empieza a funcionar mejor el negocio y factura una cantidad considerable de dinero, es recomendable que deje el plan de autónomo para empezar a considerarse Sociedad Limitada. Las condiciones cambian y las tasas también. Infórmate si es tu caso.
Cambiar de autónomo a Sociedad Limitada
Un autónomo debe plantearse cambiar a Sociedad Limitada si empieza a facturar de 45.000 a 50.000€. En ese momento le es más rentable actualizar el plan. La explicación de ello es que el trabajador autónomo paga en volumen a lo que factura mensualmente, mientras que las SL pagan una cuota fija, por lo que le será más rentable en plan de SL.
¿Qué es una Sociedad Limitada?
Las Sociedades Limitadas es lo que más abunda en España, utilizada por los pequeños empresarios. Las deudas van acorde al dinero que se haya aportado y no, como ocurre con los autónomos, con el patrimonio propio.
- La principal diferencia con el plan autónomo es que la SL debe de firmar unos Estatutos previos a ejercer en el Registro Mercantil teniendo claras las diferentes aportaciones en el caso de que sean diferentes socios. Esto supone un gasto que acarrea el notario.
- Es posible que los socios de la SL colaboren del mismo modo en la empresa o bien que algunos, simplemente, sean capitalistas.
- Para empezar con el negocio se debe presentar un capital social en forma de dinero o en forma de bienes, y ello debe de tener un valor de al menos 3.000€.
- El Objeto Social de la empresa debe quedar claro desde el inicio y ello es la actividad a la que se va a dedicar la empresa.
Motivos para pasarse de autónomo a Sociedad Limitada
A continuación te exponemos los principales motivos que te convencerán de que debes pasarte cuanto antes a Sociedad Limitada si reúnes las condiciones antes descritas. Además, existen organismos y asesorías fiscales destinadas a ayudar a los autónomos en estas situaciones.
- Si estás facturando más de 40.000€ al año te conviene pasarte a SL por el siguiente motivo: reducirás tu carga fiscal respecto a tu plan como autónomo.
- Tu patrimonio personal va a quedar intacto, ya que puedes responder a las deudas de su sociedad con el importe que aportaste cuando la fundasteis, por lo tanto es muy diferente al plan del autónomo, que debe responder con su propio patrimonio en caso de deuda. Se puede decir que es mucho menor el importe que arriesgan los empresarios que poseen una SL que los autónomos.
- Es la mejor opción si, como autónomo, necesitas en muchas ocasiones la ayuda de otras personas. Si os hacéis socios y establecéis los estatutos para crear una Sociedad Limitada deberéis tener firmado previamente el trabajo que va a desempeñar cada uno y la retribución posterior. De este modo no existirán problemas en cuanto a sueldos, ya que estará firmado ante notario y todas las partes serán conscientes de cuál es su papel en la empresa.
Es posible que a estas alturas ya hayas realizado el balance de lo positivo y negativo que tiene ser autónomo para valorar si te encuentras en las circunstancias de poder pasar al plan de Sociedad Limitada y empezar tu nueva vida como empresario, con un nuevo modo de facturación y una nueva imagen de marca.
Para aclarar del todo este tema, consultamos con nuestro experto asesor fiscal de autónomos, Juan Carlos Gómez de miasesoriaweb.com, quien nos advierte del posible problema de trabajar con una sociedad interpuesta con el objetivo de ahorrar impuestos.
“Debemos tener en cuenta que si somos un profesional (medico, abogado, economista, fontanero, etc.) cuyos ingresos provienen directamente de su trabajo, Hacienda considera que debemos retribuir dicho trabajo con el 85% de los ingresos generados por la sociedad, sin considerar nuestra nómina imputada”.
Podemos verlo mejor con un ejemplo:
Supongamos que eres autónomo profesional y facturas 100.000 euros por una sociedad, teniendo una nómina de 50.000 y unos gastos de 10.000 euros:
- Lo que se hace:
- Ventas: 100000
- Salario: -50000
- Gastos: -10000
- Beneficio: 40000
- Tributa por IMPUESTO DE SOCIEDADES 20%: 8000
- Lo que quiere hacienda (y si te inspeccionan pagarás):
- Ventas: 100000
- Gastos: -10000
- Beneficio previo: 90.000
- Salarios (85% según criterio de hacienda): 76500
- Beneficio real: 13.500
- Tributa por IMPUESTO DE SOCIEDADES 20%: 2700
Pero la diferencia de criterio hace que en lugar de tributar en renta por 50000 € debas tributar por 76500, pudiendo llegar a tipos de casi el 50%.
Por tanto, debemos tener cuidado cuando somos profesionales y tratamos de ahorrar impuestos con una sociedad interpuesta, pues puede salirnos caro.
Otra cuestión en la que también debemos hacer hincapié antes de hacer el cambio es que si, por ejemplo, tenemos un comercio y lo transformamos en sociedad para ahorrar impuestos, pero queremos seguir ganando lo mismo y disponiendo del mismo dinero que cuando éramos autónomos, seguiremos pagando lo mismo y no tendremos ningún ahorro en impuestos. Si el dinero lo percibimos como nómina podemos disponer de él libremente, pero si se queda en la empresa solo podremos gastarlo en material de la empresa, ya que no es dinero del autónomo.